El mar siempre ha sido fuente de riqueza y trabajo para las poblaciones costeras de nuestro país. Ser marinero de pesca de altura es una profesión que exige mucho sacrificio y, un estilo de vida único para saber llevar su trabajo en condiciones complejas (altas olas que elevan los barcos, duros temporales, frío, etc.), lejos del hogar, de la familia. Cada vez hay menos personas que quieran dedicar su vida a ello.
La gente de la mar, de la pesca de altura, está compuesta por marineros, capitanes, contramaestres, engrasadores, oficiales de máquina y demás puestos, que pasan la mayoría de sus vidas pescando, entregando su valioso tiempo al mar para que, cuando vayamos a los mercados nos encontremos con deliciosas piezas de pescado.
El comercio marítimo internacional y el mundo cuentan con un gran aliado incondicional: la gente de mar. Es por ello que, en reconocimiento a estos protagonistas anónimos, la Organización Marítima Internacional (OMI) promulgó en el 2010 el día 25 de junio como Día de la Gente de Mar. La jornada busca ensalzar la contribución de los millones de marinos del mundo a nuestro bienestar.
La gente de mar constituye un eslabón esencial en el desarrollo del comercio internacional, en medio de riesgos y restricciones que atentan contra el cumplimiento de su labor. Este 2023 la campaña se centra en la contribución de la gente de mar a la protección del medio marino.